Entrada a la ExpoCannabis.
Del cuatro al seis de octubre se dió en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la exposición sobre marihuana más importante hasta el momento en el país, donde se busco difundir sobre la salud, la industria, el cultivo y la comunidad. En la misma, hubo presentaciones de libros, talleres de autocultivo, de elaboración de aceite medicinal, cremas y alimentos, conferencias, información sobre la industria y la medicina. Esto permitió que las personas interesadas puedan quitarse dudas, informarse, aprender en comunidad y compartir conocimientos. Dentro del predio de La Rural había distribuidos cinco puntos informativos: de acceso a la justicia, de acceso a la salud, de encuentro con ONGS, de ciencia y de arte; cada uno estaba dirigido a quienes querían informarse o charlar con profesionales y especialistas en sus áreas o divertirse con juegos. Además, hubo gran cantidad de stands de los que participaban organizaciones sin fines de lucro y marcas nacionales e internacionales ya insertadas en la industria que venden productos para la plantación y lxs fumadorxs, aceite de cannabis, ropa.
Las entradas se agotaron, esto demuestra el interés de gran parte de la sociedad por esta planta, por la legalización de la misma, por la necesidad de mejorar para muchxs su salud derivada en el autocultivo y de no ir presxs por plantar, por buscar el bienestar. Las personas que acudieron exigen que se derriben los mitos: no es una droga, es medicina y esto lo avala la Organización Mundial de la Salud (OMS). El poder terapéutico del cannabis es muy ventajoso, desde los vínculos personales hasta la industria, el cannabis es cultura y comunidad, así lo sienten quienes lo consumen.
Una de las conferencias que se dicto fue la denominada “Madres que cultivan” de la que participaron Valeria Salech, Fernanda Canut, Mariana Rios y una médica, mujeres madres pertenecientes a la ONG Mamá Cultiva Argentina. En la misma, cada una contó su experiencia con el cannabis medicinal, como conocer este aceite les cambio la vida para siempre a ellas y sus hijos, como las empoderó para solicitarles a sus medicxs que no las apoyaban a que vayan a estudiar al respecto, a tomar las riendas de sus vidas diarias y de quienes cuidaban, a informarse y elegir de que manera curarse y curar, a saber qué es lo que les hace bien, entender que cada persona tiene derecho sobre su propio cuerpo y que “todo cuidado es político”. Lo que promueven, desde esta organización, es el autocultivo, porque al hacerlo unx sabe lo que está consumiendo, al cada unx hacerse cargo de su propia planta no tiene barreras dinerarias y sabe cuál es el contenido, por eso, proclaman la soberanía sanitaria. Sumado a esto, procuran por políticas públicas que faciliten y aprueben el acceso a la planta, concientizan acerca de los derechos de lxs usuarixs de cannabis medicinal y acompañan a aquellas personas que se acercan a ellas por falta de efectividad de los métodos medicinales tradicionales, hegemónicos y patriarcales. La Ley 27.350 es insuficiente, necesitamos la legalización del AUTOCULTIVO YA!
Redacción: Giuliana M. Gambino